Otra vez lo mismo; aparentemente las únicas personas sociables con las que puedes entablar alguna conversación en el transporte público son los católicos o cristianos “practicantes”.
-¿Usted es creyente?- Fue la pregunta de una mujer de cuarenta años peluquera de profesión, en aquel viaje para ver la Semana Santa en Quito.
- Soy ateo pero respeto todas las creencias.
-El señor le ha puesto en mi camino para que le abra los ojos al amor más infinito y la bondad más generosa. ¿Usted sabe de dóde viene? ¿Por qué está en este mundo? ...Por la voluntad de Dios.
-Usted ha oído de la teoría cuántica- Pues es la religión de los que creen muchos hombres de ciencia y evolucionistas, en que la casualidad es el origen de todo- le contesté transportado a mis más profundas creencias por esa pregunta.
-El señor le ha puesto en mi camino para que le abra los ojos al amor más infinito y la bondad más generosa. ¿Usted sabe de dóde viene? ¿Por qué está en este mundo? ...Por la voluntad de Dios.
-Usted ha oído de la teoría cuántica- Pues es la religión de los que creen muchos hombres de ciencia y evolucionistas, en que la casualidad es el origen de todo- le contesté transportado a mis más profundas creencias por esa pregunta.
-¿Cómo puede pensar así? ¿No se ha dado cuenta que todo en la vida tiene un orden y que ese orden fue creado por un ser superior?
- Para mi la religión es el consuelo de los pobres y los afligidos, conozco 4 tipos de religiones: La filosóficas, que creen en las palabras de un hombre sabio, como Buda, Confucio o Lao Tse; las naturalistas, que creen en el poder de la naturaleza, como el sol la luna, montañas, cascadas, ríos, truenos, o la lluvia y que tienen pruebas materiales de ese poder divino; las mitológicas, como los hebreos, hinduistas, católicos o musulmanes, que creen en mitos de humanos o seres extraños mágicos y extraordinarios, que pueden volar, subir al cielo, hacer milagros, en ángeles, reencarnaciones, vida en otras dimensiones, en la resurrección después de la muerte; y las religiones totémicas o imaginativas, que creen en objetos, ritos, y conductas que recuerdan al poder de la imaginación, que fue lo que permitió al homo sapiens de África dominar al hombre de Cromagnón o de Neanderthal de Europa y expandirse por todos los continentes, hasta llegar al extraordinario poder dentro y fuera de este planeta que ahora tenemos incluso para destruir y autodestruirnos. A todas esas religiones las admiro y a la fe como un importante motor de los seres humanos pero yo no creeo en la verdad eterna sino en el conocimiento, que es una verdad de corta duración que permite la duda.
- Para mi la religión es el consuelo de los pobres y los afligidos, conozco 4 tipos de religiones: La filosóficas, que creen en las palabras de un hombre sabio, como Buda, Confucio o Lao Tse; las naturalistas, que creen en el poder de la naturaleza, como el sol la luna, montañas, cascadas, ríos, truenos, o la lluvia y que tienen pruebas materiales de ese poder divino; las mitológicas, como los hebreos, hinduistas, católicos o musulmanes, que creen en mitos de humanos o seres extraños mágicos y extraordinarios, que pueden volar, subir al cielo, hacer milagros, en ángeles, reencarnaciones, vida en otras dimensiones, en la resurrección después de la muerte; y las religiones totémicas o imaginativas, que creen en objetos, ritos, y conductas que recuerdan al poder de la imaginación, que fue lo que permitió al homo sapiens de África dominar al hombre de Cromagnón o de Neanderthal de Europa y expandirse por todos los continentes, hasta llegar al extraordinario poder dentro y fuera de este planeta que ahora tenemos incluso para destruir y autodestruirnos. A todas esas religiones las admiro y a la fe como un importante motor de los seres humanos pero yo no creeo en la verdad eterna sino en el conocimiento, que es una verdad de corta duración que permite la duda.
-Tras aquella larga explicación la mujer se despidió diciendo: Dios le bendiga.
Ahora entiendo porque me es tan difícil comunicarme. Dios no me entiende.
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