El derecho al trabajo

Cuando entró a trabajar en el Ministerio por el estado de emergencia, debido a las inundaciones en la Costa, pensó que tendría la oportunidad de un sueldo y un trabajo estable,  además la nueva Constitución, por la que hizo campaña en el 2008, garantizaba el acceso gratuito a la salud y aumentaba su presupuesto  lo que permitió contratar  a 4000 nuevos médico estatales.

- El contrato a prueba es por tres meses-le dijo la jefe de personal de aquella área .

- Si, es lo normal.  ¿Hay luego contratos definitivos? - preguntó .

- Eso lo decide el Director Provincial.
Durante los siguientes meses, hasta completar dos años, le siguieron haciendo contratos de tres o seis meses.  Para aquel médico esto era raro,  pues había alguna vez contratado personal y sabía que luego de los tres meses, lo legal, era firmar un contrato definitivo, pero estaba bajo una ley especial llamada LOSCA, que no sabía que diablos significaba.
En su lugar de trabajó  lo hacían trabajar  hasta 80 horas a la semana, aunque su contrato era por cuarenta, igual a lo que ocurria con los porteros y el chofer de la ambulancia a los que les tenían en las mismas condicones desde hace años.
Su vida  se complicó cuando se negó a faltar a la Nueva Constitucion que prohibie que diera $20 dolares para la campaña en favor de un candidato al que además le debia dar su tiempo de trabajo repartiendo publicidad  y que dejara su trabajo para un a movilización política?
- No iré a esa movilizacion en respaldo de un ministro que  tiene que rendir cuentas en la Asamblea. Yo voy a cumplir con la de vacunación que cuesta millones de dolares y de paso visitaré en sus casas a pacientes que están graves-
- ¿ Estás seguro?- Le preguntó el jefe de área.

Al cabo de dos años de contratos temporales, su contrato no fue renovado.   Se preguntaba una y otra vez ¿Por qué si en las evaluaciones profesionales que hacía el gobierno, había quedado como uno de los mejores, se lo  dejaba afuera?... ¿ Por quë el Presidente proclamaba que los empleos públicos eran un espacio para las personas con manos limpias, corazones ardientes y mentes lúcidas, y era precisamente la gente que tenía una conducta turbia, en esa red de favores, encubrimiento y complacencias la que tenía el trabajo seguro?  La realidad era tal como se lo advirtieron los campesinos, desde el primer día  en que llegó y como siempre, a los mejores médicos y enfemeras se los sacó y quedaro el lastre. Era como lo que ocurría en la historia de Dr. Zivago en Rusia.
 ¿ Por qué,  aquellos que dominaban el papeleo con el que se engañaba al país y se hacían las estadísticas, inventado días trabajados, pacientes y consultas no realizadas, y hacían negocio o intimidación  con las medicinas gratuitas y suplementos alimentarios, negándosela a los enfermos que no eran de sus simpatías,  tenían el derecho al trabajo?. ¿Por qué los amparados por aquellos corruptos sindicatos de la salud, que  por décadas habían secuestrado hospitales y centros de salud, a cambio de privilegios, seguían siendo los más favorecidos?   ¿Por qué no se les permitía a los pueblos, mediante el voto de los usuarios del servicio, escoger el personal que los debe atender y estos cargos seguían siendo botín político?.

Cuando volvió a casa con la mala noticia,  la familia  regresó nuevamente al drama de sobrevivir  en bases a un trabajador por cuenta propia, autoexplotado y que tenía que cobrar a sus pacientes, algo que se iba contra sus principios de que  "la salud es un derecho y por los derechos no se paga se lucha".
 Tenía que volver a captar pacientes, en un ambiente donde la gratuidad de las salud estatal  le restaba ingresos.

Su mujer preocupada por el pan del día le dijo para consuelo.

-Es mejor ser cabeza de ratón, o sea tu propio jefe, que cola de león, al servicio de una burocracia con décadas de corrupción.

Aquel médico se quedó mirando sus libros de medicina , su tensiómetro, su estetoscopio y el cartel con la cara del presidente, que tenía en la sala y decía "El país ya es de todos"..
Este es un buen gobierno- pensó- al menos tuve un oportunidad que no me dieron  otros - pero igual que con Eloy Alfaro, es difícil cambiar una historia de discriminaciones, que empezó en 1534 y ahora es parte de una cultura política...si, es muy  difícil.  En Estados Unidos, Rusia, Europa, China, Japón aquello costó ríos  sangre humana y guerras fratricidas.   Al menos hubo al nacer este siglo XXI , alguien que se atrevió a pensar  en un cambio, aunque ese cambio aun sea una ilusilón y por ahora un papel llamado Constitución que sin ser perfecta es perfectible . Pero estoy pensando que la  verdadera revolución  vendrá en la medida en que cada ser humano en Ecuador, y otros países pobres como éste, pueda escoger en consultas frecuentes todo, empezando por su médico.  Ahora es  un privilegio  escoger el profesor, el trabajador de salud, el policía, el teniente político, en especial  en los campos. Escoger el médico, es  lujo que tienen  aquellos que pueden pagar.  Se que con los cambios tecnológicos como el internet, el poder, el conocimiento, la información ya no son de ciertas élites y la sociedad se ejercita diariamente en el hábito opinar y de escoger, empezando por las compras, o la ropa; ahora se puede escoger hasta la filiación sexual sin que esto sea motivo de persecusión.
Tras aquella reflexion se puso su mochila al hombro y salió a recorrer los campos curando y enseñando quienes son los ecuatorianos, así empezó una nueva vida con menos. Los del Ministerio de Salud   decían que no le renovaron el contrato porque era "rayado",  e inventaban cuentos sobre él, hasta que lo convirtieron en un ser mitológico, que alguien  recuerda..