Se le fue su hija con destino a Dinamarca . La casa se quedó con un hueco, ya no abría aquella muchacha que lideraba a un grupo de fanáticos de los Backstreet boys, ya no habría la persona que vivía casi en secreto, y que se irritaba por tonterías, pero que llenaba la casa con fotos y entusiasmo maravillosos.
-Es mejor que sean felices en cualquier parte que infelices aquí- dijo su madre entre lágrimas al rumiar con su marido aquellos momentos amargos.
La muchacha había encontrado la ilusión del amor y éste le dio alas.
-Me hubiera gustado que fuera a estudiar un posgrado- dijo su padre.
- Quizás lo más importante para ella sea el amor.
Es que esa energía pareciera ser un estado superior del alma en que todo desaparece para abrigar una sola cosa: la ilusión, aquella extraña fuerza de la que emerge la magia del ser humano.
En el aeropuerto fueron a despedirla los miembros de su club, que se quedaron toda la noche junto a ella para ese instante, sus hermanas, su sobrina, aún bebe; eran una alegría y pena al mismo tiempo.
Sus padres que se abrazaban como consuelo tras 30 años de matrimonio, recordaban como ellos un día hicieron lo mismo, mientras una de esas lágrimas corrieron a abonar una esperanza.
-Es mejor que sean felices en cualquier parte que infelices aquí- dijo su madre entre lágrimas al rumiar con su marido aquellos momentos amargos.
La muchacha había encontrado la ilusión del amor y éste le dio alas.
-Me hubiera gustado que fuera a estudiar un posgrado- dijo su padre.
- Quizás lo más importante para ella sea el amor.
Es que esa energía pareciera ser un estado superior del alma en que todo desaparece para abrigar una sola cosa: la ilusión, aquella extraña fuerza de la que emerge la magia del ser humano.
En el aeropuerto fueron a despedirla los miembros de su club, que se quedaron toda la noche junto a ella para ese instante, sus hermanas, su sobrina, aún bebe; eran una alegría y pena al mismo tiempo.
Sus padres que se abrazaban como consuelo tras 30 años de matrimonio, recordaban como ellos un día hicieron lo mismo, mientras una de esas lágrimas corrieron a abonar una esperanza.
No hay comentarios:
Publicar un comentario