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miércoles, 28 de diciembre de 2011

El concurso



Queridos amigos y amigas:

Esta ocasión es para compartir con ustedes algunas emociones: la felicidad y satisfacción de construir cada día y de motivar la creación a través de la imagen, del sonido y del arte. Gracias a cada uno de ustedes por hacer posible y exponer sus sueños, 
sus formas de mirar la vida, la realidad, la belleza, la tristeza, la alegría a través de sus films, de sus producciones audiovisuales.

Nuestros más sinceros deseos para que este año sea lleno de retos, para que este año se produzca mucho más, para que se abran más oportundiad y finalmente nos consolidemos como gremio.

Un abrazo refuerte para todos y cada uno de ustedes.

 Isabel


Estimada Isabel





Aun no se porque caray, me siento lleno de frustración, aun me pregunto como fue que se me ocurrió dejar de un lado esas rutinas de atender pacientes y sentarme a escribir y producir una serie de TV, que respondiera a aquello que en mis alucinaciones pensaba que era necesario sacar del anonimato: la historia de la salud y la vida de nuestros pueblos indígenas.
 Por un accidente, confusión o no sé que diablos, logré hacer 13 programas; porque no se como gané un concurso, que como todos los concursos donde el juez o los jueces son  ilustres sabios de la Grecia y no una masa critica de comunes y corrientes espectadores, como los que van al fútbol.  Es que estoy convencido que en todo concurso donde pocos son los jueces es en esencia  un nido de la injusticia.

Hoy me siento como todos esos ratones que alaban su queso rancio y no pueden creer que para nuestra TV los programas de mofa   sean estelares y que aquellos que piensan que eso "engancha mas gente que Salud y Vida en la Mitad del Mundo", lo que yo hago, donde los campesinos, tienen voz y una vida valiosa que contar desde que son niños, donde se investiga se analiza se ve las enfermedades y conflictos sociales se enfrentaron, donde se ve a los  a los seres humanos con una perspectiva histórica, donde se muestra como una familia se interesa por la realidad de su país sea visto de lejos.
Pero .....claro, me olvidé que vivo en un país donde el pueblo come tripa-misqui con moscas, y se deleita con el diario recuento de mujeres asesinadas que lleva  diario El  Extra, con la sangre en TV de En Carne Propia,  con los  talk shows de Laura o la novelas de la mafia y violencia colombiana. 
 Los "extrafalarios" que hacemos extraordinarios esfuerzos para que la televisión sea diferente,  lo hacemos porque los que hacen televisión en el país no han sabido llenar una inquietud y una demanda de televisión para la dignidad humana.  Se formaron en las universidades para hace lo bonito no lo bueno, para entretener no para enseñar, para vender y venderse no para despertar el pensamiento, la curiosidad y peor la dignidad y valia humana y de la naturaleza.
Lo que  nos anima a profesionales ajenos a esta profesión a hacer TV, es enseñar, o mejor dicho mostrar,  a los que ven nuestro programa " que lo que el árbol tiene de florido es por aquello que tiene sepultado "(Facundo Cabral).

No se si tiene sentido participar en convocatorias y concursos en las que te dicen sólo quienes ganaron, sin que nadie de los concursantes, ni del público pueda entender porque alguien gana o pierde.  Cuando como todo concurso debería ser un tiempo de aprendizaje, como cuando vamos un partido de básquet o a una maratón,  donde para todos queda claro quien es el ganador y quien el perdedor, los jueces están para castigar a los tramposos.
Un buen concurso es aquel en que todos los que participan y asisten aprende, admiran, reconocen y se perfeccionan, lo que despierta sus ganas de volver a insistir tras la derrota, porque hay un mar de cosas que mejorar, descubrir y hacer.   En esos concursos las derrotas son simples eventualidades, el  hecho de participar  como actor o espectador ya es un logro.
Participar sólo para que le llegue la estúpida notica de que perdiste.."porque sí", es perder el tiempo, aceptar con resignación la sentencia de un juez sin entender, discutir, ni valorar su criterio. Es volverse a convertir en un vasallo un sumiso e incondicional súbdito del  Rey del Imperio Español, como lo fueron nuestros antepasados en la Colonia.
Es antihistórico aceptar que en este mundo que estamos sometidos a una voluntad, capricho o criterio de otro ser humano, al que se le ha dado un poder de manera arbitraria, ajena a la voluntad de los participantes y beneficiarios con el producto final a obtenerse.
Es una forma de humillación, cuando un grupo selecto te quiere encajado en su parámetros; parámetros en la mayoría de casos, ajenos a lo que ocurre más allá de las cuatro paredes de su oficina, que ven por el ojo miope,  cuando la lucha de nuestra especie va en otra dirección, en la que todos los seres humanos nos encanta reconoceremos y reconocer al mejor en algo, como lo que sucede con el futbolista Mesi y el Barcelona de España.  
Y esta lucha por ser reconocidos, por reconocerse con  un poco de dignidad es la lucha de los que sienten que su vida perdió dignidad en Europa y Estados Unidos.
Espero que la vida me de otra oportunidad de vivir y hacer las cosas conforme a esta conciencia personal que he adquirido, que aunque como ahora me enfrente a una momento económico crítico por haberme atrevido a dejar los ingresos regulares de una práctica profesional como médico, por la aventura de conjugar la belleza, el saber, lo imaginario y lo real, en algo con la posibilidad de trascender a otras generaciones, para que sea más entendible la salud y a vida del mundo que nos tocó vivir y el que vivieron los habitantes de mi país.
Siempre me pregunto porque los cantantes que el pueblo ama no salieron de concursos, ni las películas que realmente marcaron nuestras vidas tienen óscares, o los libro que te llenan no ganaron el premio Nobel y me alegro que sea así,  porque sino,  la esperanza de los creadores estaría en manos de jurados y la gente sólo tendía que vestirse con los criterios de los dueños de las esperanzas, que manejan recursos económicos o superestructuras .
Pero además estamos entrando a un siglo de la TV con internet, donde cada persona puede subir a You Tube su propia pelicula, su  propio show, su propio programa de TV y puede recibir en este espacio la acogida que estos concursos y canales no interactivos nos niegan en nuestro país, pero es posible en ser visto y reconocido en cualquier parte del mundo. 
 Esto es el verdadero camino hacia la democracia, el otro sólo es política.  En la democracia, no hay fronteras, credos, reyes, políticos, jueces, ni censura, hay ética esto es el arte y la ciencia del respeto, pero desaparece la moral que nos imponen los credos, dogmas, partidos políticos, gobernantes, miedos y mas taras humanas que quieren convertir en conducta colectiva lo que es un valor personal, pues esta bien creer en una religión, en una  en un político, en una doctrina, en un mito, en lo que sea, si es personal y con ello espíritu se eleva, sin hacerse ni hacer daño.
 En democracia, cada uno es dueño de su voz y de su voto y puede manifestarse, tiene en sus manos un poder, un camino una habilidad y recursos que lo puede usar libremente, en la política, alguien decide por los demás, como los jueces de un concurso. 
 Por eso política y democracia son lo opuesto, en el primero el ser humano es un  actor, inventor, creador, artista, un ilusionado que escoge en todo, y muestra lo que es y puede hacer para que otros lo escojan,  el en otro lado, en la política, siempre es un espectador, aunque sea el inverntor, el genio, el famoso, alguien alguien ajeno a ál  escoge lo que cree que es mejor para los espectadores, para el negocio, para el ranking, para el gobierno, para el jefe, para su amigos, para su dios, para la paz o para la guerra, etc. y los espectadores tienen  que servirse el plato que les obligan los jueces.  En a política todos somos espectadores, en la democracia todos somos actores.
 En la política se pretende ciudadanos correctos, esto es que cumplan con un deber impuesto por el partido, o una fuerza económica en el poder, a cambio de derechos; en la democracia, se quiere personas, esto es gente con carácter, pensamiento, sentimientos voluntad y sobre todo pensamiento propio, nacido del ejercicio frecuente de elegir, proponer, hacer, construir, inventar, imaginar. La democracia es un espacio donde cada quien se reconoce a si mismo y reconoce a lo que le rodean para transformarse a y transformar la realidad personal y del entorno.
Entonces Isabel ya ves que más importante que exponer sueños, de los que tu concurso eligió como ganadores,  es ayudar a construirlos, a perfeccionarlos y a darles incidencia.  Mas importante que convertirse en Dios que llama a muchos y escoge a pocos convertirse en Prometeo, el dios mártir que enseñó todos a los seres humanos a usar el fuego, o en Cristo hijo de un carpintero y una jóven madre, que enseño todos los seres humanos el valor del perdón, el amor, la pobreza y la humildad, o el Che guerrillero que nos enseño ha ser coherentes entre lo que pensamos y lo que hacemos por los demás.
Saludos y un año lleno de una nueva visión
Maximiliano 
 

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